Carreteras sin sentido

Largas y profundas carreteras sin frontera, caminos sin final, viajes sin destino, alguna vez quisiera tomar mi cigarrera, enfundar mi pañuelo, abrochar mis botas, ajustar mis pantalones y salir de esta ciudad, caminar por horas, andar sin ningún rumbo destruyendo sentimientos, anexando confusiones, quisiera hacer un viaje el centro de tu mirada, a lo profundo de tus ojos negros hundirme dentro muy dentro como tu sonrisa se ha quedado grabada en mi mente, filtrarme en tu pecho y encadenarme con fuerza, esconderme en el filo de tus labios y perderme en tu pecho… He conocido tantos lugares, tantas costumbres, tantas maneras de vivir, ninguna se asemeja a tu brillo inconfundible, ¿de que me sirven los viajes? ¿de que me sirven los destinos? ¿de que me sirve la felicidad si no existes para compartirlos? ¿de que me sirven los éxitos y las glorias si nunca estas cuando mas te necesito? ¿de que me sirven tantas “Carreteras Sin Sentido”? quisiera viajar de regreso a mi mundo, a ese mundo mágico he impenetrable, a ese mundo en el cual quise invitarte tanto tiempo, ese mundo tan especial en donde no existe nadie, solo yo. Tengo miedo, es verdad, miedo de que la soledad me invada y me robe por la eternidad, pero al fin ¿Quién soy yo para compartir mi vida? Eres hermosa, me cautivas con pronunciar mi nombre, tal vez me aferro, no lo se, tal vez… eres hermosa… “al menos huyo porque amo” si huyo porque te amo, huyo por temor a ser lastimado mas…

En definitiva ese viaje será largo y lento, pero llegare a mi destino “yo se que te olvidare”, no te odio, mucho menos te detesto, empiezo a dejar de decir: TE AMO…